viernes, 14 de mayo de 2010

Igneel el heroe de Laskan (parte 2)

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Ya empezó aquella terrible guerra donde un reino lucha por proteger sus tierras y el otro por robárlas.

Igneel había entrenado duro todos estos días, tenía fe de que Alice pudiese estar allí, aunque la rabia llenaba su corazón el sabia que todo estaría mejor después de que la rescatase…

Ya todos alineados en el campo de batalla, listos para tomar ese Castillo, Igneel estaba muy nervioso el sabía que esto no era un juego y que todo se decidiriá entre la vida y la muerte en ese campo de batalla.

Igneel monto su caballo y fue a rescatar a su princesa como en los cuentos de hadas…
El grupo estaba guiado por el capitán con caballería pesada, catapultas, arqueros entre otros miembros, todos listos preparados para la guerra. En total eran 1500. Tenían un gran numero pero cuando fueron acercándose al castillo se dieron cuenta que ellos los superaban en cifras,
Esto iba a ser una masacre...

Igneel habla con el capitán, necesitaban una muy buena estrategia para que al menos las vidas que se sacrificaran no sean en vano. Tenían que salvar a la princesa y principalmente igneel tenia que rescatar a su amada.

Se separaron del grupo tomaron 200 de sus mejores soldados y dieron vuelta atras, intentando dar la vuelta al campo de batalla para entrar por la parte trasera del castillo, mientras el resto del ejercito luchaban feroz mente. Ellos serian la carnada...

Al fin igneel y el capitán logran llegar al castillo con sus hombres. Ellos lograron Evadir ese gran ejercito, ahora de ellos dependia rescatar a los demás y salir con vida de ahí cueste lo que cueste. Rompieron las puertas traseras del castillo y empezaron a buscar. Pero el enemigo como siempre contaba con un haz bajo la manga, el castillo estaba repleto de guardias, ahí empezó la masacre y la lucha por sobrevivir.

Igneel no podía descuidarse ya que de él dependía la vida de su esposa, agarro su espada y empezó a luchar como nunca, lanzando espadazos y cubriéndose con su escudo pudo abrirse paso hacia los calabozos. Efectivamente allí estaban todos los prisioneros. Igneel lo primero que hizo fue buscar a su esposa, despues buscar en cada celda se dio cuenta que ella no estaba ahi. llega el capitán con las llaves que tomo salvagemente del guardia de seguridad, le dice; Igneel tenemos que darnos prisa antes de que ellos se enteren. Igneel preocupado, ya que entre todos los capturados no estaba su esposa.

El capitán empieza a rescatarlos y escoltarlos hacia la salida, tenían que escapar ya de ahí, al rato llega un mensajero y estaba informando que tenían muchas bajas, pero que el rey contacto con países vecinos y pronto llegarían los refuerzos. Ahora su misión era distinta, tenían que resistir hasta que llegaran los refuerzos. Pero igneel no se quedaría con los brazos cruzados…

Igneel empezó a registrar el castillo completo, luchando con cada cosa que se ponía a su paso, el lo único que quería era rescatar a Alice, y salir de ahí. Subiendo aquellos escalones enemigos, a lo lejos pudo oír la voz de su esposa, se emociono tanto, fue corriendo y entra bruscamente en una de las puertas de ese castillo, y se encuentra con tremenda sorpresa, uno de los guardias estaba propasándose con ella y la tenia desnuda, apunto de violarla. Igneel con toda la rabia del mundo agarra su espada y le corta las manos a tal escoria mundana.
La toma de la mano, le tira unas sabanas y le dice, - Alice, tenemos que salir de aquí YA!, no faltara mucho para que los refuerzos de los enemigos lleguen, ella asienta con la cabeza, y se van.

Ya saliendo del castillo aquel de la muerte, ya todo el ejército retirándose nota que falta muchas personas aun, y era que no habían sobrevivido, igneel nota en el suelo que incluso el capitán había muerto. Era una masacre atroz y no quedaba más nada que huir de allí.

Igneel toma su caballo, monta a su esposa, y se encarga de dirigir el grupo ya que el capitán había muerto, toma su espada y grita; A LA CARGA! Y salen todos disparados de ahí, para su desgracia en el momento que estaban escapando… al frente le esperaba una gran sorpresa el enemigo lo esperaba con tremenda muralla de soldados.

Todo estaba perdido, era menos de 50 soldados contra 500 y aun no llegaban los refuerzos.
Igneel empuña su espada, la alza al cielo y grita;

-Continuara...

domingo, 9 de mayo de 2010

Aquella fragancia & su deseo oculto

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Desde aquella mirada deseosa, entre los pasos hacia la alcoba, silenciosos pero seguros. Subiendo los escalones de la lujuria,  deseo, sexo y amor. Tomas unos segundos y volteas con tus ojos subliminales. Tus expresiones faciales lo dicen todo, esta noche pretenderemos pasarlo en grande.

Tus manos  tocaron con delicadeza aquel picaporte, aquel picaporte prohibido que con tu determinación y certeza apretaron el seguro que nos mantendrá unidos por unas largas horas.

Con una sonrisa de oreja a oreja, te alejas un poco de la escena, frente a frente a la solitaria cama,
Con tus brazos empiezas poco a poco a desprenderte de aquel vestido que te hacia lucir tan hermosa.

Llega el momento que muestras algo de tu espalda,  presiento que estas algo avergonzada pero con ganas de seguir. Aquellos lazos que amarraban tu vestido fueron llevados al suelo como las hojas de los arboles viejos. En unos cuantos segundos ese hermoso vestido pasó a ser una decoración más de la habitación.

La silueta de la parte de atrás de tu cuerpo aun cubierto por ligeras piezas de ropa, era una tentación, una tentación que ya no podía parar.

Atraído por tu  fragante perfume, como una abeja por la miel. Llego hacia ti, mi pecho tan cerca de tu espalda,  una sensación tan cálida, tan romántica.  Cruzando mis brazos por tu cintura como una cadena, apretándote ligeramente.

Ese momento era el adecuado,  para susurrarte en el oído que te amo.  Aquella fragancia que provenía de tu cuello, me tenía hipnotizado, mis impulsos estaban a punto de ser desencadenados, en ese momento tu respiración se agita, y nuestros cuerpos forman uno solo.

Mis manos se confabulan con mis labios deseosos de humedecer los tuyos.  Voy poco a poco descifrando tu cuerpo con mis dedos cada línea, cada curva parecían que fueron hechas para mí.
Volteas bruscamente y te pones frente a frente.  

Nuestros corazones eran la sinfonía musical de la habitación, dejando caer  tu espalda lentamente en la cama me acerco mas y mas.

Recuerdo cada mordisco suave y dulce en mis labios, su forma de besar era única, especial.
Mis manos guiadas por las líneas tentadoras de su cuerpo, pasando por los lugares que nos estremecían a ambos.

Tu respiración cambia en  deliciosos sonidos que me llenan de locura, de repente tus caderas sedientas se apoderan del momento, agitándose como las delicadas cortinas de las ventanas en una gran ráfaga de viento. Inevitablemente ya no hay pasos atrás, mi  alma al igual que mi corazón está en camino para encontrarse con las dulces caricias del placer que dos corazones generan al volver a nacer y quizás nunca más se volverán a ver.

Aquí yacen mis más profundos deseos, esos deseos prohibidos que una vez fueron parte de mi cuerpo, de mi alma, pero que fueron arrebatados por el perfume de aquella mujer, de su fragancia exótica y de su erótico cuerpo.

Aquí yacen, en mi habitación, en la que cada día abro los ojos y despierto con mi cama vacía y la sabana arrugada. El sol en la cara, que entra cada mañana por mi ventana borra aquellos recuerdos prohibidos, mientras que la luna con su luz, cálida & melancólica me los trae a la memoria.

Inspirado En Pamella García. & Su Perfume.